La otra vida de Rachel

Un solo instante. Dos destinos posibles.

Adictiva, romántica y desgarradora, La otra vida de Rachel es una extraordinaria historia de amor

Rachel tiene veinte años, un novio atractivo y cariñoso, un grupo de amigos maravillosos y todo el futuro por delante. Pero unos días antes de que se marche a la universidad, durante la cena de despedida, ocurre una terrible desgracia.

Cinco años después vive sola en un piso minúsculo de Londres, con un trabajo sin futuro, aislada de todos y con un eterno sentimiento de culpa por aquel trágico suceso que lo alteró todo. Haría lo que fuera por dar marcha atrás al reloj, pero la vida no funciona de esa manera... ¿O tal vez sí?

Cuando regresa a su pueblo por primera vez desde aquella noche, sufre una caída y se golpea la cabeza. Al despertarse en el hospital, todo ha cambiado. Es como si su vida hubiera tomado un rumbo distinto desde el día de la despedida. Está comprometida con un chico fantástico, vive rodeada por su familia y sus amigos, tiene la carrera profesional con la que siempre había soñado, y su mejor amigo sigue a su lado. Pero ¿por qué no consigue deshacerse de esos extraños recuerdos de una existencia muy distinta? Y ¿ya tiene claro quién es el amor de su vida?

Rachel, una joven de veinte años llevaba una vida bastante buena. Tenía un novio guapo y adinerado, unos buenos amigos, y estaba apunto de entrar en la universidad de periodismo. Como despedida del instituto y nueva etapa de vida, Rachel se reúne con sus mejores amigos para despedirse, y entonces ocurre algo terrible, que ella nunca se podrá perdonar.
Tras cinco años, Rachel no tiene otro remedio que volver a reunirse con la gente que tantos malos recuerdos le trae, por motivo de la boda de la que entonces era su mejor amiga, pero antes de que fuese el día del evento, Rachel sufre una accidente que la despertara en otra vida totalmente distinta, en la que nada ni nadie es como era, por suerte o por desgracia.

Cabe a destacar que la portada es bastante bonitas. Los colores alegres en una portada de un libro siempre son bienvenidos

El libro comienza contando esa terrible desgracia que provoca que Rachel quede juzgada e castigada por si misma, para el resto de los años. Un tiempo después tiene la obligación, apoyada por su padre, de asistir a la boda de la que era su mejor amiga.
Días después Rachel sufre un accidente y entonces se despierta en otra vida que no es la que era.
Conforme van pasando los capítulos, Rachel esta mas trastocada, no sabe si creer lo que le dicen sus seres queridos junto a lo que ve en la propia realidad, o creer en la vida que ella ha estado llevando mucho tiempo. Se encuentra por el camino una serie de conjeturas, teorías y contradicciones que harán que el libro tenga un buen punto de suspense e intriga para que no dejes de leer... por lo menos hasta el 60% aproximadamente.
A partir de ahí, el libro cambia de género y nos lleva a una novela romántica, pero no una diferente, si no una que es totalmente previsible y que no hace falta mucho para saber como acaba la historia. Y entonces llega el final, el desenlace y la explicación de la vida paralela de Rachel.
Es un final que te podrías haber imaginado mientras vas avanzando, puesto que si no era difícil encontrarle una explicación lógica a muchas cosas, pero por la forma en la que esta contando y las lineas tan emotivas que podemos leer, te hacen dejar con un muy buen sabor de boca.
La relación que tiene Rachel con sus padres es una pequeño cliché del libro que no deja indiferente.

6.5/10